Cada persona es un mundo y en algunos casos dos, hay
muchos tipos de individuos que con el paso del tiempo los vas descubriendo… en
este caso solo hablo de gente conocidas no de amigos, no es este el medio más
idóneo para hablar de amigos…
Hoy diferencio a dos tipos totalmente distinto, pero
como dice la frase los extremos terminan tocándose…, en un lado hay gente que
conoces de toda la vida pero realmente no sabes absolutamente nada de ellos,
siendo estos verdaderas tumbas sobre sus intimidades y vida privada, pero
encima presumen que sus misteriosas vidas que por su interés deberían ser llevadas al cine o hagan una fantástica serie televisiva con sus magnificas mundologías, con tanto misterios y secretos que algunas veces cuando hablas con
ellos no te enteras de nada de lo enigmático e incógnito que es su lenguaje con
tantas claves y contraseñas convirtiéndolos en verdaderos jeroglíficos a
descifrar.
Y el otro ejemplo todo lo contrario estas personas hablan
tanto de ellos que consiguen aburrir y aturdir a más de un oyentes, estos
personajes nos cuentan toda su vida casa vez que nos "pillan" con pelos y señales y sobre todo con más
pelos que señales, estas deciden los temas o argumentos de todas las
conversaciones y ellas mismas se convierten en su particular centro de gravedad
permanente, durmiendo hasta las ovejas… ellos son los que comienzan el "monologo obligado" y los que lo terminan siempre a su antojo esperando que les quede
algún desesperado y irritado espectador para ello y no haya huido... el homo sapiens se da por vencido.
4 comentarios:
Es curioso, me he dado cuenta que eso lo hacen mucho los ancianos que viven solos, no tienen con quien comunicarse y cuando tienen la ocasión, los pobres se desmadran hablando, a mi no me molestan, no me dan lástima sino ternura, a lo mejor sin darme cuenta a veces lo haga yo mismo...
Salud
Pienso como Genín,abrazo.
Los dos polos, pero algo positivo nos aporta cada persona. Hasta la conclusión de no querer ser como tal persona, es un aporte.
Saludos.
Estoy de acuerdo, Mamé, tanto aburre el hermético como el que siempre que comentas algo salta con:"Uy, a mi también" y ya no hay mas dios ni mas santamaria que escuchar... como siempre, en el punto medio está la virtud...ojalá estemos allí, jomío....
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