"DUELO A GARROTAZOS" GOYA 1819
Mientras estas tres palabras “Rojos, fachas y
perroflautas…” sean monedas de cambios entre nuestros políticos, la democracia de este país estará cogida con alfileres. La sociedad de a pie está cansada y asqueada de tanto engaños y timos, cuando
empieza a funcionar algo en positivo alrededor se llena de zancadillas y
estratagemas, si miramos al cielo solo se ven las sinuosas sombras de los
buitres carroñeros y si lo hacemos al frente las hienas se ríen de todos
nosotros.
¿Queda alguien honesto…? Está claro que si encontramos
un simple bolígrafo en una mesa y nos lo guardamos y no preguntamos quien es el
dueño, imaginarse los podríamos hacer con fajos de billetes de 500 euros “perdidos”.
Quizás tengamos todos un poco de sangre de piratas o
filibusteros y así nos va, pensamientos de corsarios, contrabandistas, forajidos,
bandidos, malandrines, asaltantes… cuentas
en Suiza, dinero negro, una nobleza que deja mucho que desear, tráfico de influencias, desfalcos a cara descubiertas,
enchufismos y amiguismos de todos los colores y tendencias, bolsas de basuras
repletas de dineros, tarjetas de créditos sin límites ni control, especulaciones
y distorsión…
Lo vuelvo a repetir pero más alto… ¿Queda alguien honesto
en este país…?
3 comentarios:
Mmmmmmmmmmmmmmmmm.vaya pregunta,abrazo.
Por supuesto, de lo contrario no existiria, pero lo que se necesita es mas cultura, por toneladas, y que no se vean ejemplos de aves de rapiña en quienes nos mandan que menudo ejemplo dan. Yo creo que el pueblo llano e incluso la clase media, pocas cuentas en Suiza tienen, si no mira las tuyas y las mias...jajaja...
Salud
Si la pregunta es por los políticos, se puede decir que tenemos lo que votamos o lo que admitimos. Hubo un pensador que dijo que la historia esta compuesta por dos grupos, los que la escriben y los que la padecen. Si es por la sociedad, me da pena que sea yo, pero te lo diré, no, no hay nadie honesto en un mundo donde no hay un ápice de auto-critica y que solo sabemos tirar balones fuera.
Publicar un comentario