Hay momentos en
mi vida que me encantaría ser el vocalista del grupo The Verve, Richard
Ashcroft, cuando interpreta la canción “Bitter Sweet Symphony” o lo que es lo
mismo “Sinfonía Agridulce”.
Tirar para
adelante y no mirar más para detrás, mandar todo a lo que no te interesa o te
fastidia directamente a la mierda, pues hay días que siento eso y más…
Más claro y alto
imposible, y eso que ya se me ha pasado la ciclo génesis y la tormenta explosiva de mi mente.
Puedo cambiar, puedo cambiar, pero aquí estoy en mi molde...
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