Cuando ya estoy viviendo la década de los 60 años, tengo
claro que ahora no es el momento de callar, sino de todo lo contrario, en 1973
empieza realmente mi historia tenía diez años y por mi casa aparece el primer
tocadiscos, un verdadero lujo, en mi cuarto jamás dejó de sonar música, y mi
banda sonora aún sigue ampliándose.
Estuve 10 años en una escuela de curas donde todo era pecado
o estaba prohibido y encima rodeado de culpa y miedo, donde hasta el recreo era una asignatura y el mayor logro
era cantar en el coro del colegio, eso nunca fue conmigo, por allí pasé de
puntillas y sin hacer mucho ruido.
Me refugie en mi habitación llena de posters de mis
artistas favoritos y mis queridos discos.
Sin darme apenas cuenta ya estaba haciendo el Servicio
Militar con 18 añitos el tiempo más perdido de mi vida.
A partir de ahí todo cambió, la juventud de aquel
momento querían el mundo y lo querían en aquel preciso instante.
No hay comentarios:
Publicar un comentario