Algo está fallando en la democracia de este país, y muchas veces pienso que esta está cogida con alfileres…, el inicio de este desencanto, yo a lo achaco a que el hecho de que desempeñar la función de políticos o de sindicalistas a la larga para mucho se convierte en una profesión y oficio, cuando esto nunca tuvo que suceder así, se supone que esos cargos son para defender ideales, pensamientos y sobre todo para conseguir un bienestar para la comunidad.
Pienso que estos personajes lo que realizan es proteger
y respaldar sus nóminas a fin de mes y buenas pensiones para cuando se jubilen, más claro…, simplemente se preocupan de sus sueldos, lo
demás de lo pasan por el arco de triunfo y sin más miramiento que sus propios
intereses.
Imagino y deseo que aún queden por ahí algún político o
sindicalista honesto y decente, y que realmente defiendan nuestra democracia, tendremos que poner un filtro para depurar a todos los partidos políticos y
sindicatos de este país, porque la verdad es que el futuro no es muy alentador
en manos de trileros y tramposos.
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