martes, 5 de julio de 2022

HABLAR POR HABLAR


El dijo, otros escucharon, ellos detallaron, vosotros mencionasteis, tú nombraste… así surge una opinión mal intencionada o una crítica dañina y feroz, sin ni tan siquiera contrastar y verificar la fuente de información, simplemente se lanza al aire sin imaginar el daño que se puede realizar con esas actitudes y maneras a otros individuos. 

Qué fácil y sencillo puede ser perjudicar e incluso destruir a una persona, se le reprocha, se le señala, se le acusa, se le juzga, se le clasifica, se le pone etiquetas, incluso se le insulta… El murmurar y chismorrear no puede ser de ninguna manera el deporte nacional, y como decía el famoso refrán “El que esté libre de culpas que tire la primera piedra”

“El que pregunta con mala intención, no merece conocer la verdad” Ambrosio de Milán.


No hay comentarios: