Que sería de todos nosotros sin internet… yo lo he
pensado alguna vez.
Ya no hay páginas web, ni blog, sin facebook, ni
instagram, whatsapp… y ahora que hacemos sin teléfonos de últimas generaciones y
ni ordenadores con capacidades de memorias interminables…
Esas miradas perdidas y esos ojos en blancos, esos
dedos nerviosos buscando teclas que pulsar, me gusta, no me gusta y compartir, y de nuevo vuelvo a preguntarme ¿Y ahora que hacemos por las calles, las paradas del autobús, en el
metro, por los bares… rodeado de gente y sin saber que hablar ni que decir?
Miramos alrededor, no miramos y callamos,
incomunicación y alejamiento, aislamiento y orfandad, pero al final solo
soledad y lo más doloroso… olvido.
La red nos atrapó y cautivó, prisioneros de la
pantalla, rehenes los gigabytes, aprisionados por el módem, recluidos en el
software, presos de la webcam… E-mail
que nos asustan y vigilan… los troyanos, los virus, las tarifas planas, el
navegador, la wifi, la fibra óptica y los iconos nos quitan el sueño y se
vuelven pesadillas… son solo casualidades en el tiempo…
3 comentarios:
Mi hija mantiene terribles batallas con mis nietos aducidos por Internet, pero para ser justos hay que decir que también hacen deporte y juegan con los amigos, sin los cacharros...
Salud
Poco a poco pasará la moda y vencerán las relaciones cara a cara y la buena comunicación. Somos selectivos y hacemos a un lado lo que no nos sirve. Así que no nos asistiremos que esto pasará.
Un beso.
Y ves... Yo no puse 'asistiremos' jajaja. Quise decir no nos angustiemos y el corrector automático siempre me da solos de cabeza, jaja. Con papel y lápiz nos comunicamos mejor que hoy que es tan fácil.
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