Más de una vez he dicho que me encanta la naturaleza y los animales, pero nunca he sido de mascotas, no me gusta tener en casa perros, gatos, pájaros y mucho menos especies exóticas, por lo tanto los reptiles en cualquiera de sus variedades no son santos de mi devoción, sería incapaz de hacerles daño pero no los quiero demasiado cerca de mi, unos porque me dan miedo y otros me producen una repugnancia que no puedo controlar, no los puedo ver ni en los documentales de la 2.
Lo que si está claro es que esta foto no es ningún montaje, está realizada en Cuba en el año 1999, si la apreciáis con atención a la serpiente “la estoy acariciando” lo más alejado de la cabeza, bueno más concreto de la boca, después de tal gesta le pregunté a su “dueño” que desde cuando la tenía y cuando me contestó que hacía menos de un mes, imaginaros mi cara… o lo que es lo mismo que no me ganaría yo la vida de reportero de la National Geographic.
12 comentarios:
La foto es auténtica!!! Yo no he tenido la oportunidad de acercarme tanto a una serpiente, y no sé que cara pondría.
Saludos, :)
Pues se te ve muy valiente, yo creo que darías el pego como reportero del National.
Hombre, hay que reconocer que una serpiente no es lo que se dice un animal de compañía.
Un abrazo.
Hola Mamé.
Yo no toco una serpiente ni de juguete, a no ser que este "hartita de vino" y no suelo beber...alcohol.
Feliz día...valiente.
cada animal en su espacio. La naturaleza quiere respeto, no domesticación.
A mi las bichas esas me producen repelús, pero me cabrea un montón la manía de la gente de por aquí por matarlas en cuanto ven una, son muy útiles en el campo, se encargan de topillos, ratones y otros bichillos pequeños.
En Venezuela, las conocidas como "tragavenaos", viven en las casas de muchos campesinos que las tienen para el control de bichos, yo me pegué mas de un susto, en una ocasión, casi se me aflojan todos los esfínteres cuando miro para arriba y estaba una enorme colgando a cinco centímetros de mi cabeza...
Todavía me dan escalofríos cuando me acuerdo...
Le tengo pánico a las serpientes, me da lo mismo que sean venenosas o no, no soporto verlas.
Bicos
Pues a mi me encantan los animales, tengo dos perros,cuatro gatos,dos conejos y hasta no hace mucho dos cabras.
Pero vivo en el campo y alli,todo es posible.
Prefiero la compañia de los animales a la de algunas personas. Éstos nunca te traicionan, siempre están de buenas y hacen mucha compañia.Sabes que todos ,ellos y nosotros, incluidas las plantas, poseemos el mismo origen genético?
Posiblemente muchos de ellos también sientan repulsión por algunas personas, sobre todo las que trabajan en los mataderos.
Un abrazo
Uff, que yuyu...
Que pelaito estabas Mame.
Pues se te ve en un gesto de valor al tocarla.
Yo me inclino por otras mascotas sobre todo el perro, las demás ¡ni hablar!, no les haría ningun daño, pero mejor lejos.
Recibe mis saludos.
No me gustan las serpientes; tampoco los ratones ni los reptiles en general. Así que conmigo no contéis para ir a la selva.
Un abrazo de Mos desde mi orilla sin bichos.
La caricia más sutil que hayas dado, jajaja. Muy buena foto. SAaludos.
Ni muerto toco yo eso...
Publicar un comentario