CANCIONES DE MI VIDA VOL VIII

Corría el año 1977 cuando en este país, el panorama musical daba un giro de 360 grados, debido a los nuevos gustos de una juventud que por primera vez respiraba aires de libertad después de 40 años de dictaduras en todos sus aspectos y formas, jóvenes que estaban deseando romper con el triste y gris pasado que anhelaban olvidar lo más rápido posible, uno de los cambios más rotundos fue el musical, pasando de unas folclóricas venidas a menos, de las reivindicativas canciones protestas y los lánguidos artistas melódicos, a los artistas de sus mismas edades que les hablaban y les cantaban en sus letras lo que realmente los identificaban con sus vivencias, de sus problemas y lo que estaba pasando en esos momentos a su alrededor, pero esta vez en su propio “idioma juvenil”.

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En ese año los hermanos Herrero, Francisco Javier “El rubio” y Pedro José “El moreno” formaban el dúo PECOS, de la mano de la producción de Juan Pardo, grababan su primer single el tema “Esperanzas” el título de la canción lo decía ya todo, que estaría incluido en su también primer L.P. “Concierto para adolescentes” y aquí empezó la leyenda de PECOS, no se recordaba una euforia colectiva de tal magnitud por unos cantantes de modas, creando el fenómeno de las fans y con ellos la “Pecomanía”, durante varios años fueron los reyes de las listas de ventas en nuestro país con todos sus trabajos discográficos, la carrera se truncó por culpa del servicio militar de sus dos componentes que los mantuvieron apartado del mundillo musical durante tres años, lo suficiente para que cuando se produjo su vuelta los gustos musicales habían cambiado totalmente con la llegada de la novedosa Movida Madrileña, quedando obsoleta y anticuada su carrera, pasando al olvido después de varios intentos de reanudarla.

Con el transcurso del tiempo, cuando ya todas sus fans serán madres y algunas abuelas aún se les recuerdan por sus bellas canciones de amor y desamor, sus melodías y como no por sus estupendas voces. He de reconocer que en su momento cuando estaban en todo su apogeo, yo los odiaba me parecían cursis y ridículos, y sobre todo porque las niñas se llevaran todo el día hablando de ellos, pero pasado los años reconozco que me equivocaba.

¿Quién no recuerda a un Pedro Marín, a Iván o un jovencito Miguel Bosé? Todos ellos tuvieron su momento de gloria, ya ha llovido desde entonces... Super Fans…