viernes, 23 de abril de 2021

TORMENTO Y CASTIGO

  

Si el infierno está ardiendo no lo vamos a apagar, si el averno está incendiado no lo vamos a sofocar, si las tinieblas se están abrazando no la vamos a extinguir, condenación y el fuego eterno como premios, las Calderas de Pedro Botero ya tienen su aforo completo...

Derrocamiento sangriento y treinta monedas de plata rodando por el suelo, acoso y derribo en conjuras de necios, conspiraciones y complot, apoyados por medias mentiras y verdades a medias, intrigas y maniobras a la luz de la luna, proyectos y artimañas en oídos sordos, ojos abiertos y bocas cerradas, un plan magnífico siempre dispuesto a fracasar, reclaman y ruegan con falsas promesas, muchos derechos y pocas obligaciones, kamikazes capaces de morir matando, muchos defectos y pocas virtudes, miles de consejos de sabios profanos, de la comedia al drama y viceversa en el escenario y en un solo acto, al final todos hacemos daño abrazando el pecado...

Tendríamos que dejar arder el infierno hasta los cimientos… y no quedaran ni las cenizas.   


1 comentario:

Sara O. Durán dijo...

Esperemos que haya un giro favorable, después de la decadencia que hay.
Un abrazo!